jueves, 6 de agosto de 2009

La segunda crisis, la segunda oleada.

Espero equivocarme pero me barrunto que no.

La clase medio-pudiente se ha lanzado a malgastar atraída por los grandes descuentos y las monsergas de las multinacionales ofertando y amenazando que los precios nunca estarían mas bajos, que la ocasión es única y que maricón el ultimo que llegue.

Compras de caprichos tirando de la cartera de reservas, hay quien no duda en darse una alegría y comprarse un regalo dejando a un lado la situación. BMW, joyas, moda, televisiones, coches... parece que va despegando o eso nos quieren enseñar por la rendija de la puerta como también hacia el lobo.

Las consecuencias serán peores que las de la tan temida falta de fe del publico en general en la primera oleada. Los problemas vendrán después, cuando se hayan delapidado esos ahorros en la confianza de que "esto ya va para adelante" y enseguida vienen otra vez las gordas. Esto se aplica a las economías familiares y a las estatales o las locales e incluso a las comunidades de propietarios.

Los pobres ya son los mas, los emigrantes parados y sus familias se han quedado, no hay ingresos pero la asistencia es la misma, el paro roza el 20 % cuando la cifra mágica dice que por encima del 10% el problema sería casi irreversible, el dinero publico se agota y las grandes banderas de las administraciones como sanidad, obras publicas, ayudas y protección van cayendo una a una ante el escalofriante descenso de los ingresos del estado.

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